ÉTICA Y MORAL
El planeta distante 100 años luz del sol es un planeta que está inmerso en tanta, globalización, contaminación y muchos problemas más y cuando digo contaminación no solo me refiero a la contaminación ambiental sino también a aquella contaminación social aquella que es un obstáculo que nosotros mismos ponemos con nuestras vidas sin ética y moral, pero esta oportunidad hablaremos del inconsciente colectivo de la ética, de las empresas que si trabajan en base a ética y son las empresas más ricas del mundo.
Miguel Ángel Cornejo sostiene que un norteamericano para visitar Disney tiene que ahorrar dos años y medio en su vida y regresa de dos a cuatro veces en su vida ya esto vendría a ser una doctrina filosófica de ese país y surge una interrogante ¿Por qué EE.UU. es un potencia mundial? Pues por lógica obtendremos la respuesta de que por su ética; la ética de Hume nos dice que son las valoraciones que están, por así decir, encarnadas en el lenguaje con que describimos las conductas y caracteres de los hombres, y encontrar el factor o los factores comunes a esas valoraciones, entonces cual es nuestra ética nacional o mejor dicho a nivel Latinoamérica si el inconsciente colectivo es “coima y avanza” estamos quedándonos estancados por no practicar ética, el problema es que su punto de partida no son un conjunto de hechos objetivos e independientes de nuestros deseos y valoraciones, sino una clase de hechos, los juicios morales (o, si preferimos, las normas morales), que consisten precisamente en esas valoraciones.
Limitaciones de los sistemas éticos; Estas consideraciones elementales sugieren la idea de que no puede existir la teoría ética verdadera, en el sentido de la apelación a un principio (la felicidad, la utilidad social, el cumplimiento del deber...) que explicara por completo la legitimidad de todos aquellos juicios de valor morales que estamos dispuestos a respaldar; y en este sentido existen países con principios un poco abstractas ya que tienen libertar en consumir lo que deseen por ejemplo en Ámsterdam en un café te dan el menú y de un lado están los platillos y del otro están la dosis de drogas que deseas, pero de qué libertad nos hablas si la libertad sin ética ya se convierte en anarquía y se olvido que un “principio fundamental y vertebral es la parte moral de una nación” Miguel Á. Cornejo; en este sentido la verdad busca el bien, la ética busca el bien del ser.
Por lo expuesto tenemos que generar una nación ética para poder lograr el desarrollo en toda su plenitud en nuestro país y sobre todo nunca dejar de soñar ¿Por qué no soñar en Perú limpio?, un Perú honesto, un Perú sin niños pobres, entonces ¿por qué no soñamos?
No todo tiene que ser ganancia en el progreso moral, individual o social (si es que se da tal progreso). Por ejemplo el estar en una comisión de ayuda humanitaria por pueblos que pasaron desgracias o algo similar nos compromete moralmente y éticamente a no coger nada de los que se recauda o sacar la conocida “coimision” para nuestro provecho olvidándonos de los pueblos.
Desde otro punto de vista, hay que tener en cuenta la diferencia de realizabilidad de las teorías éticas, y ello no sólo por razones de práctica política, sino también por coherencia teórica. Pero estas consideraciones no sugieren la idea de que exista una teoría definitiva. Incluso aquellas teorías que, como el intuicionismo, resultan definitivamente pobres desde el punto de vista teórico, recogen seguramente ciertos aspectos del discurso moral que sería imprudente subvalorar.
Por otro lado Miguel Ángel Cornejo nos recuerda que nunca debemos olvidarnos de algo muy esencial en nuestra vida que viene a ser la humildad, que por supuesto está dentro de lo ético no dejar de pisar tierra para no estar aleteando como lo sostiene Cornejo y pone como ejemplo a Juan Pablo II, que era un hombre que tenía un cargo tan importante a nivel mundial y lo cristiano, Juan Pablo II cada vez que llegaba a un país en signo de amor y humildad besaba el piso de ese país demostrando así su grandeza reflejado en humildad en cada país.